Hoy en día, se utilizan métodos avanzados de ultrasonografía y HSG (película uterina) para detectar anomalías relacionadas con el útero. Una ventaja de la película uterina es que se puede evaluar si las trompas están abiertas o cerradas.
Examinamos las anomalías uterinas en dos grupos;
- Deformidades congénitas y
- Problemas que se adquieren (adquiridos)
Deformidades congénitas
La situación más común que encontramos es el velo parcial o completo en el útero, esta estructura, que médicamente se llama tabique, puede ser revelada muy claramente por ultrasonografía. Aparte de esto, los casos como útero de dos cabezas (bicornis), medio útero (unicornis), doble útero (didelphis) también se revelan mediante ultrasonografía. Estas anomalías pueden causar un aborto espontáneo y prevenir el embarazo. Si se detectan mediante examen, se tratan con métodos quirúrgicos cerrados (histeroscopia o laparoscopia), aumentando la posibilidad de que la paciente quede embarazada espontáneamente o con el método de fecundación in vitro.
Problemas adquiridos (adquiridos)
Las adherencias formadas en el útero debido a abortos o infecciones, fibromas o pólipos que presionan el útero se pueden enumerar entre los más comunes. Estas formaciones pueden prevenir el embarazo al crear un efecto de presión sobre el útero, y es posible eliminar estas patologías mediante histeroscopia.